Los fosfenos son las sensaciones luminosas subjetivas, o imágenes que persisten en la retina, ejemplo de fosfeno son los patrones luminosos que se ven al frotar los párpados con bastante presión o después de haber mirado fijamente una luz.
Entre 1959 y 1963, un médico francés llamado Francis Lefebure atraído precozmente por las ciencias espirituales emprenderá un señero camino hasta dar a conocer sus estudios sobre los fosfenos y la mezcla fosfénica. Sus descubrimientos entorno al ritmo cerebral y las fijaciones de la vista sobre fuentes luminosas le llevan a sentenciar que estos dos conceptos inciden recíprocamente y de manera espectacular en el desarrollo de la memoria, inteligencia y creatividad, así como en la potenciación de facultades de percepción supranormal. Constituye, por tanto, un elemento que podemos utilizar para intensificar nuestras meditaciones, para consolidar el pensamiento y aprovechar esta punta de actividad mental.
Algunas aplicaciones:
Para el Desarrollo de la Creatividad: Nos concentramos en el fosfeno y dejamos que vayan fluyendo imágenes libremente, como si estuviéramos realizando la técnica de la Corriente de Imágenes. La diferencia es que en este caso las imágenes serán más vívidas, y el estímulo del cerebro es directo a través de la luz.
Para la Memoria: Cuando tenemos el fosfeno, visualizamos lo que queremos recordar como si estuviera escrito sobre él (ver imagen). Podemos ubicar un mapa mental, una fórmula matemática, un mapa geográfico, etc. Esto fija los datos en la memoria con facilidad.
Para sus incondicionales Francis Lefebure fue un excepcional investigador que estableció un sólido lazo entre la fisiología cerebral y las técnicas iniciáticas. Mantuvo con rotundidad que la fosfenología era el elemento clave que todos buscaban para aunar ciencia y “magia”.
Fuentes:
Zona de caos
Meditacion total
viernes, 1 de enero de 2010
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wow :O !
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