domingo, 18 de diciembre de 2011

¿Nos da miedo pensar?

Los hombres temen al pensamiento más de lo que temen a cualquier otra cosa del mundo; más que la ruina, incluso más que la muerte.
El pensamiento es subversivo y revolucionario, destructivo y terrible. El pensamiento es despiadado con los privilegios, las instituciones establecidas y las costumbres cómodas; el pensamiento es anárquico y fuera de la ley, indiferente a la autoridad, descuidado con la sabiduría del pasado.
Pero si el pensamiento ha de ser posesión de muchos, no el privilegio de unos cuantos, tenemos que habérnoslas con el miedo. Es el miedo el que detiene al hombre, miedo de que sus creencias entrañables no vayan a resultar ilusiones, miedo de que las instituciones con las que vive no vayan a resultar dañinas, miedo de que ellos mismos no vayan a resultar menos dignos de respeto de lo que habían supuesto.
¿Va a pensar libremente el trabajador sobre la propiedad? Entonces, ¿qué será de nosotros, los ricos?¿Van a pensar libremente los muchachos y las muchachas jóvenes sobre el sexo? Entonces, ¿qué será de la moralidad? ¿Van a pensar libremente los soldados sobre la guerra? Entonces, ¿qué será de la disciplina militar?
¡Fuera el pensamiento!
¡Volvamos a los fantasmas del prejuicio, no vayan a estar la propiedad, la moral y la guerra en peligro!
Es mejor que los hombres sean estúpidos, amorfos y tiránicos, antes de que sus pensamientos sean libres. Puesto que si sus pensamientos fueran libres, seguramente no pensarían como nosotros. Y este desastre debe evitarse a toda costa.
Así arguyen los enemigos del pensamiento en las profundidades inconscientes de sus almas. Y así actúan en las iglesias, escuelas y universidades.

Bertrand Russell: "Principios de Reconstrucción Social".

domingo, 27 de noviembre de 2011

sábado, 29 de octubre de 2011

El Verdadero Conocimiento

Tú que lo sabes todo; sabes que busco en vano
Semillas y tierras para cultivar con certeza,
Pero la tierra es oscura entre la maleza,
Indiferente a la lluvia o lágrimas que derramo.

Tú lo sabes todo; sabes que me siento y espero,
Con las manos frágiles y los ojos ciegos,
Hasta el último pliegue del velo,
Hasta el ocaso de la puerta.

Tú lo sabes todo; sabes de mi vanidad,
Confío en que mi vida no es en vano,
En que algún día nos tomaremos de la mano
En una extraña y divina eternidad.

Oscar Wilde.

jueves, 9 de junio de 2011

Insinuación

Mientras el sol esté en el cielo y el desierto tenga arena
Mientras las olas se estrellen en el mar y lleguen a tierra
Mientras haya viento, estrellas y arcoiris
Hasta que las montañas se desplomen en la llanura
Oh, sí, seguiremos intentándolo
En la cuerda floja
Oh seguiremos intentándolo, sí
Pasando el tiempo.

Innuendo - Queen.

jueves, 28 de abril de 2011

El amor

"El amor es, sin duda, la forma más pura de reconocimiento. Más pura que la admiración, el poder o la gloria. Para ser amado no hay nada que hacer. Ni menos tener. Sólo ser. Y vendrá alguien que reconocerá tu rostro en una multitud, te adivinará único y te eligirá entre todos. "

Maria Luisa Bombal.

miércoles, 23 de marzo de 2011

Eric Fortune

(A Place that I Remember)

miércoles, 9 de febrero de 2011

Preguntas...



Lo que me interesa de estas preguntas es el lugar extraño hacia el que miran los cerebros cuando escuchan la pregunta.
Cuando preguntas, ¿por qué los mayores construyen los columpios siempre encima de un charco?, tu cerebro mira hacia un sitio que no ha mirado antes.
La respuesta a esa pregunta no importa, sin embargo, la pregunta te hace pensar en cosas en las que antes no habías pensado.
El mundo está lleno de respuestas, sólo hay que hacer las preguntas adecuadas.

La Vanguardia.

viernes, 28 de enero de 2011

Poema LXXV

Estáis muertos. Qué extraña manera de estarse muertos. Quienquiera diría que no lo estáis. Pero en verdad, estáis muertos. Flotáis nadamente detrás de aquesa membrana que, péndula del zenit al nadir, viene y va de crepúsculo a crepúsculo, vibrando ante la sonora caja de una herida que a vosotros no os duele. Os digo, pues, que la vida está en el espejo, y que vosotros sois el original, la muerte. Mientras la onda va, mientras la onda viene, cuán impunemente se está uno muerto. Sólo cuando las aguas se quebrantan en los bordes enfrentados y se doblan y doblan, entonces os transfiguráis y creyendo morir, percibís la sexta cuerda que ya no es vuestra. Estáis muertos, no habiendo antes vivido jamás. Quienquiera diría que, no siendo ahora, en otro tiempo fuisteis. Pero en verdad, vosotros sois los cadáveres de una vida que nunca fue. Triste destino el no haber sido sino muertos siempre. El ser hoja seca sin haber sido verde jamás. Orfandad de orfandades.Y sin embargo, los muertos no son, no pueden ser cadáveres de una vida que todavía no han vivido. Ellos murieron siempre de vida. Estáis muertos.

César Vallejo- Trilce.

miércoles, 5 de enero de 2011

Mundo perfecto.



Dentro de la bola de nieve del escritorio de mi padre había un pingüino con una bufanda a rayas rojas y blancas. Cuando yo era pequeña, mi padre me sentaba en sus rodillas y cogía la bola de nieve. La ponía al revés, dejaba que la nieve se amontonara en la parte superior y le daba rápidamente la vuelta. Los dos contemplábamos cómo caía la nieve poco a poco alrededor del pingüino. El pingüino estaba solo allí dentro, pensaba yo, y eso me preocupaba. Cuando se lo comenté a mi padre, dijo: «No te preocupes, Susie; el tiene una vida agradable. Está atrapado en un mundo perfecto».

"Desde mi Cielo", Alice Sebold.